las llamadas de teléfono y mi memoria de pez

sabes lo que me pregunto hoy? por qué hay tanta gente que se cree especial?
no es coña, es una pregunta que hoy no para de darme vueltas.

me he pasado parte de la mañana sola en el despacho contestando las cuatro líneas de teléfono que tenemos, y además de esas personas que cada día parece que confunden nuestro teléfono con el información de telefónica (que no sé yo porque me llaman a mí para pedirme el teléfono de la competencia, ni porque debería saber donde venden cada cosa que yo no tengo, pero bien) y las típicas consultas que siempre acabo pasando al mostrador, porque si te soy sincera poquito sé yo de lo que tenemos y de los precios... he tenido varias de esas llamadas que me dan risa por absurdas...

te cuento:
- si, dígame?
- soy el de antes.
(el de antes de qué?)
que me has pasado con alguien
(vete tú a saber con quién...)
y quiero que me lo vuelvas a pasar porque tengo una pregunta mas...

y aquí empieza el quien es quién (mira que me gustaba ese juego!)

- era hombre o mujer?
- hombre
(lo que reduce la busqueda a solo cinco candidatos.)
- me podría indicar sobre que era la consulta para preguntar con quien ha hablado...

y la mayoría se indigna! como si después de responder a las llamadas que respondo a lo largo del día me tuviera que acordar de quien llama y a quien le paso cada llamada!

lo dicho... por qué nos creemos tan especiales cuando en realidad solo somos una llamada mas para una pobre secretaria que responde al teléfono casi de manera mecánica?

o será que tengo memoria de pez?