odio, odio, odio estar en la caja...
lo admito, es superior a mí... al teléfono nadie me ve la cara de pocker que se me queda cuando escucho determinadas cosas... pero en la caja... ahí tienes que poner cara de cajera, y así como lo de la voz de secretaria se me da bien, la cara de cajera sigue siendo un misterio para mí...
y es que hay de cada uno suelto que te juro que no sé cara poner...
entre la parejita que ha entrado toda conjuntada ella... que mas que novios parecían hermanos y que su madre, con mas de treinta años cada uno, los siguiera vistiendo iguales...
(nota: no se deberían hacer esas cosas... no obligues a tu novio, por mucho que te quiera y que tú le quieras, a ponerse una camisa del mismo color que la tuya... no, no, no.)
además de la parejita conjuntadita, también me encanta la parejita enamoradisísima que se ha pasado sus diez minutos de espera morreandose delante mío... ay! que bonito es el amor... aunque después del segundo morreo cansa...
y qué me dices del que te mira fijamente? mira que me inquietan los clientes que me miran fijamente... me ponen nerviosa... que no se puede uno quedar mirando a la cajera y pasarse así el rato hasta que les toca que les atiendan... que yo al final no sé como hacer que no me doy cuenta de que me están mirando...
y me abuuuurro en la caja... prefiero estar escondida en el despacho... así no tengo que escuchar como un amigo le cuenta a otro (en voz tan alta que para mí que nos lo está contando a todos) la borrachera que se pilló el sábado pasado y las tetas que tenía la camarera del garito donde fue... y que no sabe porque no le quiso dar su teléfono...
odio la caja... (y el que mira fijamente sigue mirandome fijamente...)
y entonces (esto no es coña aunque lo parezca) viene mi tipo de cliente favorito: el que cree que soy adivina, y me hace mi pregunta favorita:
- me dices cuanto es?
y no habría problema si yo supiera de que habla... porque me lo suelen preguntar señalando una bolsa blanca opaca que tiene un material dentro que yo no les he dado...
que complicado...
menos mal que ya cerramos...
1 comentario:
ummmm... estoy pensando una solución "standar" para ese que pregunta cuánto es..... ¿1.000 euros? jijiijij.. y le dejas planchado.. por supuesto acompñaado de ese movimiento tuyo de cejas y de esa preciosa sonrisa! le dejas descolocado!!!!
Afortunadamente en mi oficina no hay caja.. pero trato con muchos rumanos, y no veas como miran...
un beso y voy a por el siguiente..
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